Sólidos como rocas. Esta expresión hecha define a la perfección las sensaciones que están dando los Grizzlies a sus aficionados y seguidores en esta primera parte de la competición por conquistar el título de campeones de la NBA. Con 5 jugadores que ya van a por su tercera campaña juntos y equilibrio entre todos ellos, Lionel Hollins ha logrado que este equipo rinda al nivel que se esperaba de él desde hace mucho tiempo. En Memphis han visto como otros proyectos creados más o menos a la vez que el suyo (Oklahoma por ejemplo) les iban adelantando y existía cierta sensación de estancamiento que ahora ha quedado totalmente olvidada.
Tras caer en primera ronda de 'Playoffs' la temporada pasada (ante los Clippers), era lógico descartarles para el campeonato de 2012/13 porque apenas se han hecho variaciones en su plantilla. De hecho, sobre el papel perdieron potencial en verano con la marcha de su sexto hombre O.J. Mayo a Dallas como agente libre. Pero en lugar de empeorar, estos Grizzlies han disparado su rendimiento una vez que han tenido a sus principales piezas en plena forma (Gay y Randolph tras volver de sus graves lesiones), que los jugadores jóvenes han madurado y que todos se han acoplado a un estilo de juego muy definido y sin problemas. En Memphis se ha apostado muy claramente por jugar duro en defensa como premisa principal, y hacerlo sencillo en ataque para conservar energias y provocar con un reparto equilibrado del balón que las amenazas para el rival sean variadas. Una fórmula simple que ha resultado perfecta para este equipo.
Son uno de los conjuntos que menos anotación recibe, que más balones roba y que más pérdida del rival provoca. Tony Allen destaca por encima de sus compañeros en este aspecto. El que quizás sea mejor defensor de perímetro de la liga está además bien secundado por fuera por Conley y Rudy Gay, cuya mejora en defensa estos últimos años ha sido considerablemente buena. Y después está la defensa de la pintura, formada por una de las mejores parejas cerrando el aro: Marc Gasol y Randolph.
En ataque, los de Tennessee tienen muy claro que su primera opción es meter pelotas al poste, donde brilla la pareja que forman Randolph y Gasol. Muy complementarios por sus características, su combinación de talla y habilidades, que les hacen difícilmente parables. A día de hoy el mejor juego interior de la liga.
Todas estas cosas son las que crean el espectáculo de la NBA y crean afición, ya que cualquier equipo de la liga puede aspirar por igual al título. El claro ejemplo de esto en estos momentos es Oklahoma, que en 2006 era unos simples y normaluchos Seattle Supersonics y ahora se ha convertido en uno de los 2 mejores equipos de la liga junto a Miami. Esta grandiosa evolución de pasar de pasar de ser uno de los peores equipos de la liga a ser uno de los mejores se debe al Draft. Que en mi opinión está muy bien igualado y organizado. Seattle cogió a Durant, al año siguiente a Westbrook y a Ibaka y al año siguiente a Harden. Y así, solo gracias al Draft, los Seattle Supersonics se convirtieron en el equipazo Oklahoma Thunder. Una super plantilla que además tiene la ventaja de que todas sus estrellas son muy jóvenes, cosa que asegura a Oklahoma seguir siendo un equipazo durante muchos años si no las vende. Y esto es lo que está pasando con Memphis, solo que a un ritmo más lento y no con tantas superestrellas pero si con estrellas.
Espero que os haya gustado. Acepto comentarios para mejorar y me gustaría que comentaseis vuestra opinión al respecto del artículo y del último párrafo, dónde comento lo de la igualdad de oportunidades de todos los equipos.
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