domingo, 30 de diciembre de 2012

Rasheed Wallace: El Villano más querido

De villano de la Liga a ser jaleado en todos los pabellones de la NBA. Ese es el cambio que ha vivido en su regreso, dos años después, Rasheed Wallace. A sus 38 años y teniendo muy limitados sus minutos de juego en la rotación de los Knicks, el veteranísimo ala-pívot disfruta actualmente sin presión alguna de sus últimos partidos como jugador de baloncesto. Y nos enorgullece decir que aún y estar mayor, su fuego competitivo no se ha extinguido.

Los mismos aficionados que tanto abuchearon a Rasheed durante la mayor parte de su carrera, ahora, sorprendentemente, le homenajean. "¡Sheeeeed!¡Sheeeeed!" es lo que se oye actualmente en la mayoría de estadios de la NBA. 





A los 38 años, dos años después de su retirada y contra todo pronóstico, el ala-pívot aceptó la oferta de los Knicks para regresar a la mejor liga del mundo.  El jugador ha dedicado estos 2 años a su familia y a viajar sin que los horarios de la NBA condicionasen su vida. Pero él nunca se fue del todo. Su amor por el baloncesto hizo que volviera a North Carolina, su universidad, a estar cerca del equipo de baloncesto, y que entrenara con jugadores universitarios y de instituto. Más o menos lo que hace Michael Jordan con los Bobcats, su equipo, para ayudar a mejorar a los jugadores y aportarles cosas positivas y experiencias a su juego. Rasheed hacía lo que le gustaba, jugar al baloncesto enseñando a las estrellas del futuro y estar con su familia. Entonces, ¿por qué volvió? Era mayor y estaba haciendo lo que le gustaba. ¿Qué impulsó a Rasheed a volver a la NBA? Basicamente fue Mike Woodsony sus insistentes llamadas durante dos meses. El técnico estaba buscando líderes para su equipo, modelos de conducta en el vestuario que empujaran y motivaran al resto del equipo. Por eso fichó al veteranísimo Kidd, Camby y Thomas, y por eso resucitó a un Rasheed al que le atrajo la idea de volver pero en un rol más limitado, aportando de otra manera. Digamos que Wallace pasó a ser como un entrenador dentro de los jugadores. Alguien que les impulsaría a mejorar y alguien del que podrían aprender muchas cosas. 


Se hace raro ver a Rasheed pasar la mayor parte del partido sentado en el banquillo. Estamos hablando de un campeón de la NBA, que disputó 15 campañas en la liga y estuvo en cuatro All-Stars. Pero también estamos hablando de un jugador de 38 años...

En su momento "Sheed" fue el jugador más irascible de la competición y un auténtico dolor de cabeza para los árbitros, lo que le valió para convertirse en el jugador con más faltas técnicas recibidas en toda la historia con 304. Ahora sigue protestando las faltas que considera injustas igual que antes, lo único es que ahora el  público se lo toma a bien, puede que porque esto les haga recordar viejos tiempos. 

Lo bueno de su retorno es que le ha servido para cambiar la imagen que la gente tenía de él. Ha pasado de ser el "villano" de la liga, a ser un jugador bien visto por la gente. Posiblemente porque ya no se toman sus quejas enserio, sino que como parte del espectáculo. Esperemos que Rasheed Wallace aguante lo máximo posible en la NBA y que no pierda su entusiasmo por la victoria que es lo que le hace ser quien es.



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